Ubicado en el centro-este del continente es uno de los países más completos que
un visitante puede encontrar en África, pero antes de iniciar la presentación lo voy a denunciar por el hecho inconcebible de poner precio a la cabeza de todos sus animales.
Ahora, volviendo a temas turísticos les comento que crucé Tanzania dos veces; bajé por la costa y subí recorriendo las
bellezas que el país ofrece tierra adentro.
Partimos
desde Mombasa en Kenia y nuestra primera parada en Tanzania fue Dar es Salaam,
que fuera su antigua capital. Allí me llamó la atención la gran cantidad de
personas de origen hindú que viven en el lugar.
Era
1996, la ciudad estaba sucia; desordenada y apostaría a que muy poco ha
cambiado aquello. La basura estaba por todos lados y los cuervos parecían la primera
mayoría del sitio.
Desde
aquí, viajamos a Zanzíbar, que voy a presentar de manera separada, porque una
vez fue independiente y ahora tiene una autonomía muy importante.
Siguiendo
sobre la costa encontramos Kilwa Kisiwani y Songo Mnara;
dos pequeñas islas que todavía conservan los vestigios de dos grandes puertos
comerciales donde, entre los siglos IX y XVI, se cambiaba el oro,
el hierro, los esclavos y el marfil de toda el África
Oriental, por tejidos, porcelanas, joyas y especias de
Asia. Estas islas
forman parte del Patrimonio de la Humanidad declarado
por la UNESCO y se encuentran en la Lista del Patrimonio
Mundial en Peligro
Siguiendo
camino rumbo a Malawi, la carretera atraviesa el Mikumi National Park, donde
vimos elefantes, cebras, jirafas y algunos de los grandes depredadores.
Así
fue mi primera entrada en Tanzania; al regreso, la carretera volvió a atravesar
reservas de animales. El viaje fue extenso y la primera parada importante la
realizamos en Moshi, donde yo me estuve divirtiendo a gusto con el clima templado mientras alguno del grupo chupaban frío mientras escalaba el Kilimanjaro de 5149 metros; pico más alto de África formado por tres volcanes
inactivos. Es cuestión de apetencias; y tanto ellas como ellos, de allá arriba, bajaron muy emocionados por haber vencido a la montaña al alcanzar la cima
En
este gran recorrido a través de un puñado de países, el plato fuerte lo
habíamos reservado para el final. Entonces, mientras el camión regresaba a
Nairobi - Kenia, tres de nosotros nos despedimos de ellos en Tanzania para
continuar nuestro camino, con otro medio, rumbo al Parque Nacional de Serengueti y la zona de conservación de Ngongoro que forma parte del Patrimonio
de La Humanidad declarado por la UNESCO. Gracias a esta visita este lugar está
incluido en un capítulo de mi primer libro: “Sex Safari”
Documentales muy interesantes
Documentales muy interesantes
Área de conservación de Ngongoro
Parque Nacional Serengueti
En el siguiente mapa aparecen marcados mis dos recorridos por Tanzania y las visitas.
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