Este
es un circuito que recomiendo a todos aquellos que llegan por
primera vez a este país y quieren ver mucha Italia en pocos días.
Tuve
la suerte de guiar a varias personas que hicieron este recorrido y, por esa
razón, tengo muy bien tomado los tiempos, pero confieso que tanto mi madre, una
persona mayor, como otras jovencitas que me acompañaron pudieron resistir gracias a
la energía que imanan estos sitios, porque en ciertos momentos el cansancio era
evidente.
Este itinerario necesita un mínimo de seis días, a partir de allí, el tiempo que se extienda va a depender de cada uno.
Este itinerario necesita un mínimo de seis días, a partir de allí, el tiempo que se extienda va a depender de cada uno.
Llegamos
a la capital de Italia y detrás del enlace van a encontrar todo lo referente a
los paseos romanos y vaticanos que ya vimos en este blog.
Terminada
esta visita dormimos en Roma y, al día siguiente, nos levantamos muy temprano
para viajar rumbo al próximo destino.
A
unas cuatro horas de viaje rumbo al norte encontramos esta ciudad medieval
famosa en todo el mundo por la carrera de caballos que lleva el nombre del
Palio de Siena (Ver el vídeo), esta modalidad la voy a utilizar en más
ocasiones, entonces, si les apetece y disponen del tiempo suficiente disfruten
de ellas y de lo contrario sigan como si estos documentales no existiesen
dentro de esta presentación.
Si
no es 2 de julio o 16 de agosto días que se corre el Palio, con
unas pocas horas tenemos suficiente para almorzar y conocer la ciudad. Esto lo
digo por última vez, para no ser muy pesado, yo voy a detallar mis tiempos que
son los más breves necesarios y a partir de allí, ustedes pueden sencillamente
copiarlos, solo tomarlos de referencias o hacer lo que les apetezca.
Esa
misma tarde-noche tomamos contacto con esta ciudad, donde nos alojamos. En este
recorrido hay alojamiento muy caro, caro y de precio acomodado.
Florencia
se destaca por su buena mesa, el buen vino y la fiesta. Ahora disfruten cuanto
puedan, porque yo soy de la idea de dejar la ciudad en la mañana. Ya sé que no
vimos nada, pero no se preocupen porque nos vamos, pero seguimos hospedados
aquí.
En
menos de dos horas de tren llegamos a la ciudad de Galileo Galilei; cuando
salimos de la estación lo suyo es coger el autobús que les lleva a la Piazza de Miracoli, (Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO), donde entre otros monumentos está la famosa torre inclinada.
A
los que se van a organizar de otra manera, les comento que esta visita no debe
ser necesariamente diurna. Al poner punto final en la plaza es bonito regresar
andando por un camino marcado por edificios de antaño, casas de famoso de otras
épocas y los puentes que cruzan sobre el río Arno. Al llegar a la estación
partimos de inmediato.
Esta
es una ciudad que nos recibe con imponentes murallas que la resguardan; su
origen se debe a que en la antigüedad pisanos y luccheses estaban de constantes
refriegas.
El
centro histórico de la ciudad ocupa una superficie poco extensa; callejear por
allí hasta encontrar la famosa Piazza Ovalle es como pasear en un sueño y
disfrutar de sus casas de comida un privilegio. Recuerdo una Navidad en la
ciudad en la que cenamos ravioles de calabaza y ricota, lógicamente, hubo
muchos más platos, pero este en particular, que fue un éxito, llamó mi
atención.
Muy
cerca de Luca está la localidad turística de Viareggio, que ofrece playas preciosas
y mucha juerga. Nuestro recorrido no nos permite ir hacia allá, pero quién
quiera desertar sepa que desde allí hacia adelante lo espera la Costa de Liguria
conocida como: “El Paraíso del Tirreno”. (En este blog hay una presentación del
sitio).
Nosotros
estamos en la región Toscana; en una fracción de Pescia nació Pinocho y allí
desde 1956 el personaje tiene su parque temático.
Otro
sitios para destacar de la zona son Massa y Carrara, desde donde se extrae el
mármol que conquistó el mundo. Disculpen estos saltos groseros; sepan que hay
muchos más lugares bonitos e interesantes y me disculpo por no poder nombrar a
todos. En esta región el verde poli-cromo, los cursos de aguas, el mar azul y
las montañas regalan paisajes maravillosos.
¿Están
cansados? Ahora mismo regresamos a Florencia y volveremos a ver a la ciudad de
noche, pero no se preocupen porque mañana le vamos a dedicar todo el día.
Al
día siguiente:
Creo
que después de disfrutar de un buen café, podemos empezar nuestro recorrido
subiendo a La Catedral de Santa María del Fiore y desde la cúpula admirar la
ciudad. La escalada por una escalera del siglo XV es dura, pero las vistas
minimizan el esfuerzo.
Cuando
bajamos de allí podemos hacer la fila (siempre muy extensa) para poder entrar a
la Galería degli Uffizi. El David de Miguel Ángel Buonarrotientre realizado entre
1501 y 1504 se encuentra expuesto en la Galería
de la Academia de Florencia.
Esta
ciudad con sus palacios, el Ponte Vecchio y el edificio antiguo del mercado es
una piña de monumentos. A vuestra llegada a un sitio recuerden siempre pedir el
mapa turístico y guiarse con el mismo. Estoy seguro de que aunque muchos de
ustedes nunca antes hayan visitado la ciudad sus lugares les resultarán
familiares de alguna de las tantas películas que se rodaron en estos palacios,
en estas calles…
Un
último detalle antes de la serie de documentales:
Si
cruzamos el río Arno por el Ponte Vecchio desde el centro hacia el norte y una
vez del otro lado cogemos hacia la izquierda (oeste) a un par de centenares de
metros vamos a encontrar una colina que también ofrece unas vistas maravillosas
de Florencia.
Llegó
el momento de seguir prolongando el viaje y cerca de la medianoche tenemos un
tren que ofrece servicio dormitorio; si lo abordamos en la mañana,
despertaremos en Venecia, pero tengan en cuenta que Bolonia, está en el camino;
si les apetece pueden detenerse en ella y su presentación la van a encontrar
llegando al final de esta página.
La
ciudad de la laguna tiene todos los itinerarios bien marcados y, sin ninguna
dificultad, se pueden hacer andando. Sabiendo esto y guiándonos con el mapa,
dejamos la estación y vamos rumbo a la Plaza de San Marcos, allí van a encontrar
la catedral de Venecia y La Torre del Campanario donde les recomiendo subir
para echar un vistazo. Sepan que si lo hacen durante una hora exacta van a
tener que soportar las campanadas; no todos somos iguales, yo recuerdo haber
disfrutado con emoción ese momento.
En
este punto que nadie se olvide sentarse a disfrutar de una mesa del Caffé Florian, que fundado en 1720, es la cafetería más antigua de Italia y una de las
antiguas del mundo.
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| Fotográfia antigua del affé Florian en Piazza San Marco |
La
ciudad es un encanto y a quienes lo deseen las góndolas le llevarán, en un
paseo inolvidable, a recorrer los canales.
Para
regresar a la estación es conveniente coger la barca del Gran Canal que pasa
por debajo del Ponte dil Rialto, frente al casino y otros palacios. Otro puente que hay que ver es: "El Puente de los Suspiros".
Venecia es
mucho más que esto y quienes quieran ampliar sepan que pueden ir a visitar la
isla de Murano, donde, todavía hoy, se trabaja de manera artesanal el vidrio.
Saben que trozos de cristales coloridos que a pesar de su belleza no valían
prácticamente nada se utilizaban para comprar hombres en África que venían
vendidos como esclavos en América. Esas piezas fueron tantas que incluso yo recuerdo
haberlas visto expuestas en algunos mercadillos al sur del desierto del Sahara.
Llegamos
de noche para dormir en la ciudad a la que le he dedicado espacio en dos de mis
libros. Verona de noche es preciosa y de día increíble.Esta
ciudad sumamente romántica se encuentra atrapada en un meandro del río Adige y
rodeada por una vistosa colina.
Les
aseguro que al atravesar el Puente de Piedra el cuerpo viene recorrido por un
escalofrío y se erizan los vellos; el recién mencionado, tanto ayer como hoy, mantuvo
y mantiene enlazada la urbe con el teatro romano cuyos restos blancos son embellecidos
por el verde de los pinos que con permiso de la historia, sin perder la
prolijidad, en aquella colina nacen y se dirigen al cielo. Volviendo al puente
de roca color crema, que forma cinco arcos sobre aguas que corren claras, les
comento que del lado de la ciudad muere con gracia donde nace el rojo del
ladrillo de una puerta monumento. Hay más tonalidades; todas son bellas y el
gris del empedrado es otro buen ejemplo. Los adoquines que tapizan el puente
continúan para dar vida a una callejuela mágica que más adelante pasa frente a
la catedral y llega a la Plaza de las Hierbas. En ese sitio, donde una vez
estaba el foro, hoy luce El Mercado, La Tribuna, la Fuente de la Madonna y la
Columna de San Marcos, esta última terminada con un león alado símbolo de un
periodo pasado bajo dominio veneciano.
La
Torre de Lamberti, ofrece vistas maravillosas de la plaza y la ciudad.
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| Balcón de Julieta |
Si
llegamos hasta allí arribas después del gozo regresamos a nivel del suelo para
a paso firme dirigirnos a la casa de los Capuleto, para ver el balcón de
Julieta, recuerdan la obra de Shakespeare (mi escritor favorito): “Romeo y Julieta”, quien quiera profundizar detrás del enlace precedente va a encontrar
esta conmovedora historia. En la ciudad también esta la tumba de ella que fue
tan bella.
Además
de eso, en Verona destaca el Castelvecchio y la Arena de Verona, que es el monumento
mejor conservado que existe de este tipo.
Curiosidad:
en las afueras de Verona hay un restaurante, que fuera una antigua posada,
donde se detenían para recuperar fuerzas los mensajeros que llevaban noticias
del y para el César, que de esta forma comunicaba con el norte del Imperio.
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| Terrasa del Duomo de Milano |
En
la capital económica de Italia, quienes no vienen para un evento, de compras o
de fiesta, sepa que con una jornada en la ciudad les basta. En la misma
estación cogen el Metro, que lo deja en la plaza de la catedral, una de las más
hermosas que existen. Allí nosotros visitamos el templo y si les apetece subimos
a la terraza por las vistas. En Milán, más exactamente en una pared del refectorio del convento dominico de Santa
Maria delle Grazie
está la pintura: “La Última Cena”, que Leonardo da Vince ejecutó sobre esa pared
entre los años 1495 y 1497; allí verán como la protegieron de
los bombardeos que sufrió la ciudad durante la Segunda Guerra. Otro para ver es el "Teatro de la Scala" fundado en el año 1776 y La Galería, lugares que están a pasos del Duomo de Milano. (Catedral de Milán)
“Leonardo
da Vince, inventor y artistas de muchas facetas como su nombre lo indica viene
de Vinve, un pueblo, hoy pequeño, no muy lejos de Florencia.”
Roma
1 noche / Florencia 2 noches /Verona 1 noche; como pueden apreciar todavía nos
sobra tiempo; situación me da la oportunidad de agregar otros destinos
opcionales que se adaptan muy bien a este recorrido.
Entre
Florencia y Venecia, podemos hacer un alto en esta ciudad que en la antigüedad
se mostraba con una cantidad inusual de torres, comparable con el aspecto que
puede presentar el conjunto formado por la tarta y las velas en el cumple de
una dama de cien años.
Dicen
que eran más de cien y hoy, todavía, dos de ellas nos honran con su airosa
presencia: Garisenda y Asinelli, la primera era la preferida de Dante que la
nombró en sus rimas e incluso en “La Divina Comedia”, esta antigua construcción
que todavía bate corazones sabe como resistir a una inclinación, preocupante,
de más de tres metros sobre sus cuarenta y ocho metros de altura. En la segunda
se duplica la altura y el paso del tiempo es menos alarmante, por esa razón,
todavía hoy se encuentran a disposición sus peldaños para que los interesados puedan
subir a admirar la ciudad desde su cima. Además de eso Bolonia posee más de
cuarenta y cinco kilómetros de pórticos (arcadas en sus fachadas) y el soportal
más largo del mundo, cuatro kilómetros de belleza que van desde el borde de la
ciudad hasta la Basílica de la Virgen de San Luca. Otro de destacar es el trozo
de canal escondido y la cisterna.
 |
| El canal oculto |
No
muy lejos de Bologna encontramos a Anzola dell' Emilia, un pequeño burgo muy
antiguo donde después del paseo pueden pasar por la pizzería Il Brigante donde
van a encontrar una de las pizzas más grandes —de tamaño— y sabrosas de toda
Italia.
 |
| Horno gigante de la pizzería IL Brigante |
Verla
en esta oportunidad es poco probable porque esta junto a la frontera eslovena,
a unas cuatro horas en tren al este de Venecia, pero de todos modos siento
deseos de incluirla.
Hasta
casi el final de la Primera Guerra Mundial la ciudad pertenecía a Austria y
recuerdo esto porque mi abuela era austriaca. Que curioso ella que vivió en
Argentina nunca pudo aprender bien el castellano y yo que viví en la Suiza
alemana nunca pude aprender a hablar muy bien el idioma de mi abuela. Sepan
disculpar este agregado familiar. Regresando a Trieste les comento que en este
lugar maravilloso pueden pasear por el puerto, ver la plaza de La Unidad de
Italia; visitar el castillo Miramare y palpar restos arqueológicos como: El
Arco de Ricardo o el Teatro Romano.
Es
una ciudad lombarda que se encuentra a 45 km de Milán junto al majestuoso lago
que la idolatra. Allí el paisaje es estupendo, las galerías abiertas por el
lado del lago por donde transcurre la carretera son escenario de muchas
películas. En la antigua catedral hay reliquias importantes construidas con
metales nobles y las callejuelas de la ciudad son un encanto. Con la primavera
llegan las flores y la gente hace que en las terracitas de las cafeterías se
cree un ambiente de sueños. Como, también, es conocida por sus villas en las
que viven millonarios y famosos.
Esta
ciudad se levanta junto al brazo inferior del este del lago de Como, brazo
opuesto al de la ciudad anterior. El camino que las une bordeando el lago es un
sueño y las características referentes a la calidad de vida y el paisaje en
toda la zona no ofrece variante.
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| Mole Antonelliana |
A
una hora y media de Milán encontramos esta ciudad industrial que se levanta
junto al río Po, el más largo de Italia, entorno a este curso de agua se
encuentra el Valentino, un parque precioso, que junto a la Mole Antonelliana, es el orgullo de la ciudad. La torre fue construida entre 1863 y 1888, símbolo
de este lugar hermanada con la Torre Eiffel. En la parte histórica de la ciudad
abundan los buenos restaurantes y las grandes cafeterías.
Sobre
las laderas alboradas del monte Capuccini están los barrios residenciales y
desde la cima las vistas de Turín son preciosas.
Si
seguimos un poco más adelante llegamos a Francia, en las proximidades del Mont Blanc (Monte Blanco), que con sus 4810 metros de altura es el pico más elevado
de Europa Occidental. De todos modos a los amantes de la nieve les comento que
no deben cruzar la frontera, porque en Val de Aosta, tienen todo lo que desean.
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| Parma |
 |
| Monasterio en Reggio Emilia que funciona como albergue |
 |
| Padova, Prato della Valle |
Ahora sí, muchas gracias y hasta el próximo encuentro.
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